Lo sé, LinkedIn impresiona…un poco. Y por esta razón, aunque en un momento u otro acabemos abriendo nuestro perfil profesional, nos cuesta decidirnos a publicar. Porque no sabemos qué decir, porque no encontramos algo que aportar o porque es más fácil, más cómodo, más directo, ocupar la posición de voyeaur social y leer lo que publican nuestros contactos o los perfiles que seguimos. Y el no publicar es un problema porque, pese a que estoy de acuerdo en que LinkedIn es una fuente inagotable de conocimiento, ese no es estrictamente su principal beneficio. Como tampoco es su objetivo servirte como cv virtual.
Aquí tienes 3 grandes errores de enfoque que se suelen cometer en LinkedIn
¿Crees que tu perfil en LinkedIn es tu perfil?
NO LO ES, es el perfil de tu audiencia/buyer, sea quien sea
¿Crees que tu perfil en LinkedIn es tu cv?
NO LO ES, LinkedIn es una red social, no un about.me
¿Crees que tu perfil en LinkedIn se crea una vez y ya está?
NO ES ASÍ, si no trabajas LinkedIn, da igual que tengas perfil
Son buenas noticias. LinkedIn tiene mucho, muchísimo más qué ofrecerte como profesional, partiendo de la base de que abras tu perfil conociendo cuáles son tus objetivos
4 tipos de objetivos profesionales para los que LinkedIn es una herramienta muy útil:
- LinkedIn para gestionar tu carrera profesional
- LinkedIn para buscar empleo
- LinkedIn para generar negocio (también desde perfil autónomo)
- LinkedIn para captar Talento
El 60-80% de las personas que están en LinkedIn quieren mejorar sus oportunidades profesionales y de negocio. Y tú, ¿qué quieres?
Ojalá bastase con tener claro nuestro objetivo, pero la realidad es que LinkedIn no es la plataforma social más intuitiva que podríamos desear. Aunque últimamente esté inmersa en una vorágine de cambios positivos que seguramente mejorarán la situación, LinkedIn es consciente de que sólo el 15% de su comunidad es activa (genera contenido y participa en el contenido de otros). ¿Por qué? Puede que gran parte tenga que ver con ese aprendizaje necesario para sacarle partido al 100%, pero la otra tiene más qué ver con qué no nos decidimos a dar el paso: publicar. Entonces sin participación, sin debate, sin generación de contenido, dejamos pasar la oportunidad doble que nos ofrece esta red social: ser encontrado y encontrar.
Insisto. Si no publicas contenido en LinkedIn es como si no existieses en esta red social.
Afortunadamente, LinkedIn nos da pistas acerca de lo que deberíamos publicar y cómo.
Empecemos con el qué publicar
Dice el propio LinkedIn que cualquier contenido que se publique debe cumplir al menos uno de estos requisitos:
- Ser valioso para la carrera de alguien (como propietario, negocio o empleado).
- Ofrecer un consejo relacionado con el crecimiento de negocio o carrera.
- Inspirar a alguien en su vida laboral.
- Ser relevante para la industria en la que opera.
¿Seguro que no tienes nada que ofrecer en alguno de ellos? Al menos en uno y si es en más de uno, pues mucho mejor. Yo estoy convencida de que sí que lo tienes.
Sigamos con el cómo publicar
Y una vez que lo encuentres, llegarás al cómo lidiar con el algoritmo de LinkedIn, “ese” que decide si se ve lo que publicamos o no. ¿He dicho “lidiar”? Quería decir “llevarte bien”. ¡No es tan complicado! Al fin y al cabo, te irá bien si cumples la regla de aquí arriba y le aportas valor a tu comunidad.
Además, tengo buenas noticias. LinkedIn acaba de sacar una actualización al mercado que promete que el algoritmo ahora también tendrá en cuenta la relevancia invisible.
Es decir, ganarán alcance aquellos contenidos que generan mucho valor en LinkedIn pero cuyo valor no se puede medir en participación, sino en tiempo de visualización (dwell time)
En otras palabras, el algoritmo no sólo valorará la interacción recibida por tu publicación sino el interés generado en lectura. Porque ya hemos comentado que LinkedIn es plenamente consciente de que su plataforma es una gran fuente de conocimiento y nosotros unos lectores poco comprometidos con la interacción.
Cuidado que con esto no estoy diciendo que podamos dormirnos y dejar de generar contenidos conversacionales, opinativos, que generan reacciones y comentarios por parte de nuestros contactos y seguidores. El contenido en LinkedIn es tan social como en el resto de redes sociales.
Para conseguirlo es fundamental la planificación y desarrollar un calendario editorial. Sí, incluso para tu perfil profesional. Si no te planificas y marcas metas, será mucho más complicado que publiques. Establecer una estrategia de contenidos es la base del éxito en redes sociales.
Y aún más, la planificación te ayudará a ir conociendo a tu audiencia profesional y detectando los contenidos que te funcionan mejor para que puedas ir adaptando tu propuesta de valor.
Seguro que en cuanto te animes y te enganches, hasta te apetecerá darle una oportunidad a Linkedin Pulse, la plataforma de artículos de LinkedIn y dar un paso más allá de las publicaciones.
“El primer paso: antes de que alguien más lo crea tú tienes que creerlo. No hay razón para tener un plan B porque te distrae del plan A. Will Smith”
O lo que es lo mismo. Genera contenido y aprovecha todo lo que LinkedIn tiene que ofrecerte. ¡Nos vemos en LinkedIn! ¿Conectamos?
Autora: Pilar Yépez, directora del área de Marketing Digital
Formamos marketers digitales de alto rendimiento a través de una metodología que une capacitación en competencias técnicas con capacitación en habilidades de performance multiplicando resultados.
Me ha encantado el artículo, a ver si pierdo el miedo a Linkedin. ¡Gracias!
¡Esperamos que así sea!
Muy intenso pero atractivo, a ver si alguien que ha permanecido fuera de su que hacer profesional como yo puede anclar en este espacio. Gracias