“Para hacer marca personal hay que destacar en algo, dejar huella en los demás”. “El Personal Branding es manipulación y es ego, pasa por conocer muy bien quién es nuestro público y qué le interesa”. Estos fueron algunos de los mensajes que Jordi Cirach, profesor de Social Media y Community Manager del Instituto Internacional de Marketing, trasladó ayer durante su masterclass “Personal Branding: Ser o no ser diferente”, jornada que nuestro instituto organizó en colaboración con el Club de Marketing de Barcelona.
Ante un auditorio lleno, Cirach, que también trabaja como articulista y redactor de tendencias culturales y tecnológicas para diferentes medios de comunicación, nos acercó de forma amena y distendida qué es lo que se conoce como Personal Branding, una tendencia cada vez más presente en el mundo de la comunicación y el marketing digital.
Para empezar este concepto que nos parece tan nuevo se trata de algo que en cierto modo nos ha acompañado a lo largo de la historia de la humanidad. A modo de ejemplo, Jordi Cirach inició su intervención haciendo referencia a una gran Marca Personal o, según él, una de las mejores Personal Branding: Jesucristo, una figura que hace siglos dejó tal huella que ha permanecido hasta la actualidad.
Pero, ¿qué es el Personal Branding? Durante la masterclass de nuestro Instituto Internacional de Marketing Cirach nos contó que, en un mundo con más de 7.000 millones de habitantes, hacer marca personal nos ayuda a darnos a conocer diferenciándonos del resto y de la competencia comunicando nuestro punto fuerte, es decir, aquello por lo que somos distintos y en lo que destacamos. “Casi todos tenemos un amigo manitas o nuestra madre destaca por ser una buena cocinera. Esto son etiquetas, esto es marca personal”.
Quién pasa desapercibido no existe
En una sociedad en la que llega el fin del anonimato y la crisis económica ha causado un entorno de precariedad y dificultades en el mundo laboral, solo sobreviven aquellos que se diferencian del resto y transmiten confianza y principios sólidos. Por ello, Jordi Cirach nos destacaba la importancia de que empecemos a construir nuestra propia marca personal. Gracias a ella nos abriremos a mayores oportunidades, ganaremos en reconocimiento, relevancia y credibilidad: nos haremos visibles, porque quien pasa desapercibido es como si no existiera. De aquí la importancia de que tengamos presencia 2.0 a través del uso de las redes sociales y que desarrollemos estratégicamente una buena identidad y reputación tanto online como 0.0, es decir, a través de nuestra relación con familiares, amigos y personas de nuestro círculo profesional.
Respecto al proceso de creación de nuestro Personal Branding, Jordi Cirach nos guió a través de las distintas fases que intervienen en él: introspección personal –conocer quiénes somos-, producto –definir qué vendemos-, público objetivo –a quién queremos llegar-, reputación e identidad digital, comunicación –haciendo uso de una web y blog propios así como de las redes sociales-, imagen personal –importancia de nuestro estilismo como forma de diferenciarnos-, provocación, posicionamiento y evolución.
Jordi Cirach hizo mucho hincapié en la provocación ya que es un factor clave en el Personal Branding. ¿Por qué? Pues porque quien provoca llama la atención, suscita interés y provoca deseo. Es decir, deja de pasar desapercibido para existir, para ser visible y destacar ante el resto.
“Es importante humanizar la marca porque a la gente le gusta conocer nuestra historia, saber quiénes somos, ver fotos…”. “Debemos comunicar nuestro talento, darlo a conocer y un día una empresa contactará con nosotros porque querrá nuestro talento en su equipo”. De ahí la relevancia del Personal Branding y que Jordi Cirach nos animara a todos a crear nuestra propia marca personal.
La masterclass organizada por nuestro Instituto Internacional de Marketing se cerró con un sorteo en directo entre todos los asistentes que obsequiaba al ganador con el Curso Técnico Superior de Creatividad en Entornos Digitales que hemos incorporado a nuestro programa formativo de disciplinas de marketing digital. El afortunado fue Abraham Amores.
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